Consejos culinarios sobre nuestros aceites AOVE
El maridaje de nuestros aceites
La clave de un buen maridaje reside por un lado, en el tipo de aceite según sus condiciones y cualidades y por otro en la variedad de aceituna empleada en su elaboración.
La graduación, la acidez y el aroma son algunos de los factores que más influyen, pero no los únicos. Encontrar el aceite que mejor case con un alimento dará un punto de excelencia a un plato cuya esencia residirá más que en su elaboración, en la materia prima empleada.
PICUAL: el aceite más intenso
Un aceite con mucho cuerpo cuyos aromas irán desde el verde, al tomate o la hoja de higuera. Su recolección temprana proporciona un aceite frutado verde de intensidad media, con un amargor y picante moderados. Un aceite de sabor muy intenso que recuerda a la madera, la hierba y la fruta verde. Potencia el sabor de embutidos, cecinas, el jamón y los quesos. Perfecto también para macerados intensos de caza o para platos crudos. Es el aceite que debe utilizarse para las frituras, ya que es el más resistente al calor.
Se recomienda su utilización para la elaboración de pescados blancos y suaves, pastas, salsas y emulsiones. También es adecuado para conservar alimentos crudos o cocinados, por su riqueza en antioxidantes naturales y alta resistencia a la oxidación.
Su alto nivel de antioxidantes naturales lo hacen especialmente indicado para el cuidado de la salud. Esta variedad contiene un fenol llamado Oleocantal el cual tiene propiedades anti inflamatorias.
El AOVE picual es el acompañante perfecto para vegetales hervidos, sobre todo para las patatas. Funciona estupendamente como base para tus arroces, paellas y muchos de tus guisos.
ARBEQUINA: el aceite más suave.
Se trata de un aceite frutado y suave, con toques de manzana, almendra y plátano y de consistencia fluida y dulce. Es muy sensible a la oxidación, ideal para utilizarlo en crudo en platos que necesiten aromatización como las ensaladas, verduras a la parrilla, marinado, salsas como la mayonesa, el alioli y la vinagreta; cremas frías (salmorejos y gazpachos); masas de repostería y frutas tropicales ácidas. También para salteados, paellas y platos de arroz en general.
Ideal para cualquier plato en el que no queremos enmascarar el sabor de los alimentos.
Es el aliado perfecto para preparar tus postres. Por su aroma sutil y delicado, el aceite de oliva virgen extra de la variedad arbequina va muy bien con las ensaladas de frutas.
COUPAGE
Mezclan distintas variedades de aceituna en su elaboración, obteniendo un aceite de oliva virgen extra estable, verde, de intensidad media, muy aromático, con un amplia gama de matices con recuerdos a manzana verde, frutos secos y especias.. Frutado verde medio con un leve amargor y picante con intensidad media y permanente.
Maridaje: Ensaladas, verduras, pescados, carnes, quesos, yogurt, frutas y chocolate.
MANZANILLA
Es un aceite con bastante cuerpo, de aromas herbáceos y a frutas maduras. Las características organolépticas de este aceite son excelentes. El aceite presenta un color amarillo oro, pudiendo tener tonos verdosos. El paladar reconoce un sabor frutado y unos amargos y picantes muy equilibrados. Maridaje ideal con pistos y platos con verduras y hortalizas, tanto cocinadas como en crudo
¿Cómo utilizar el aceite de oliva en la cocina?
Aceite en Crudo
En España y en la gran mayoría de países mediterráneos es el uso más extendido, de esta forma se conserva todo el sabor de este preciado “oro líquido”. El aceite de oliva virgen extra se aprovecha mejor a temperatura ambiente dado que es la mejor manera para conservar las propiedades y el aroma. el A.O.V.E es ideal para aliñar ensaladas, aderezo de verduras, para carpaccio y sobre ahumados, bocadillos embutidos.
Aceite para cocinar y freír
El aceite de oliva virgen extra es una de las grasas vegetales más estables cuando se somete a temperaturas altas, por esta razón es ideal para frituras, asados o cocción, mejorando las cualidades gastronómicas de los platos aportando aroma y gusto, además es mucho más sano que el resto de aceites vegetales. La temperatura óptima para freír es entre 160-200 grados, a esta temperatura el aceite conserva la gran mayoría de propiedades y aroma formando una capa dorada y crujiente alrededor del alimento que permite conservar mejor sus nutrientes.
Recomendaciones para freír con Aceite de Oliva Virgen Extra
- Calentar el aceite para que alcance una temperatura de entre 160 y 200 grados. A esta temperatura la fritura es óptima. El aceite conserva todas sus propiedades y forma una capa alrededor del alimento que hace que conserve mejor sus nutrientes y tome una textura crujiente y dorada. Para que esta cobertura se forme bien es importante no mover mucho el alimento mientras se cocina.
- Los alimentos deben estar secos (para evitar salpicaduras y quemaduras) y a temperatura ambiente. De esta forma se evita que la temperatura del aceite se reduzca de forma drástica y que las fibras de los alimentos se rompan.